El martillo de Thor

Thor, en la poesía de los skalds, se presenta como hijo de Odín y de Iord, la Tierra. Ese origen misterioso lo haría un semidios, según afirman ciertos textos. Su valentía, su fuerza, el número de sus aventuras han llevado a acercarle a Heracles, cuyo emblema es la clava, especie de martillo.
Su arma característica se llama Mjollnir, frjado por el enano Sindri. Cuando Loki lo desafió a forjar objetos dignos de los dioses; de esa apuesta salieron el Mjollni, el anillo Draupnir, el Skidbladhnir, el jabalí Gullinbursti y la lanza Gugnir. Loki había apostado su cabeza a que Sindri no lo lograría; al ver que el enano iba ganando, decidió intervenir, transformandose en un tábano, sobrevolando sobre Sindri, molestandolo.
Pero al ver que Sindri jamás desviaba su atención de la fragua, Loki se lanzó sobre su ojo, provocandole una herida muy molesta, que hizo que se desviara de la forja, unos pocos segundos; por ese descuido el mango del Mjollnir es muy corto, tanto, que se deben usar guantes para que a uno no se le resbale y lo aniquile.
El arma del dios tiene la facultad de volver a la mano de quien lo lanza, como un bumerang, pero sería mejor decir que el bumerang copia al Mjollnir, ya que êl es muy anterior. Es, asimismo, la fuente de poder del dios, si se le priva del martillo su poder se verá muy menguado.
Es (el martillo) el signo más frecuente en las inscripciones rúnicas, grabados rupestres, y, sobre todo, estelas fúnebres, para asegurar el reposo de las almas. Como sigue figurando en monumentos tardíos, se ve como una protesta contra la obligación de representar únicamente la cruz cristiana. Los dos emblemas se asemejan, y, en la Saga de Haakon el Bueno, se dice que el rey, en un festín fúnebre, hizo el signo de la cruz sobre una copa de hidromiel. Como algunos protestaron, el valeroso hêroe Sigurd les explicó que el rey, fiel a los viejos usos, había tazado con las manos la forma del martillo de Thor.
El Mjollnir tambiên tenía un papel en los matrimonios, pues se pensaba que alejaba a los poderes malêficos y prometía a la esposa fecundidad. Thor, en efecto, tambiên estaba considerado como el dios de la fecundidad, puesto que gobierna el trueno, la lluvia y los vientos, de que dependen las cosechas.
Pero el martillo es ante todo el rayo. Cuando retumba el trueno, es carro de Thor -Donar, que, tirado por machos cabríos, rueda sobre la bóveda de los cielos, cuando el rayo hiere la tierra, es Thor que lanza su martillo. Sin embargo es favorable a los hombres, gigante bonachón, batallador y privado de toda malicia.
Mantenía a raya a todos los monstruos del Asgard, gigantes y demonios. Defendiendo tanto a los dioses como a los hombres. Su gran y mortal enemigo es la Sepiente del Midgard, o Midgardthormr o Jormungard, como ustedes prefieran.
No he terminado con Thor, aún faltan sus mejores aventuras.